Hoy en día, quien cuenta con los recursos, elije cambiar las viviendas a nivel de calle por el confort y la seguridad de un conjunto cerrado. Pero como en una unidad, el conjunto cerrado requiere de alguien que sea el administrador de propiedad horizontal.
Una persona que se encargue de llevar las cuentas y sepa utilizar óptimamente los ingresos. A continuación, te contamos por qué es importante y cuáles son sus deberes:
Requisitos y funciones de un administrador de propiedad horizontal
Usualmente esta labor se les asigna a pensionados o a personas que pasen la mayoría de su tiempo en el conjunto. Si tú eres uno de ellos, te contamos acerca de lo que puedes y lo que no debes hacer si eres elegido administrador.
El perfil del que se busca es el de alguien con comprobable capacidad gerencial. Que sepa administrar y tomar decisiones ante las necesidades que el conjunto tenga. Debes conocer las leyes de propiedad inmobiliaria para evitar que, por un error, todos los residentes sean multados.
El administrador no nace… Se asigna
Ser administrador de propiedad horizontal no es un cargo que uno se asigna el día que más se necesite. Este nombramiento tiene lugar en la Asamblea de Copropietarios. Si tu propiedad está en una zona con más de 30 bienes privados, estás obligado a constituir con tus vecinos un Consejo de Administración.
Puedes ser escogido como administrador si eres propietario de alguno de esos bienes privados. O también si alguno de los propietarios te nomina como su delegado. No puedes pertenecer al Consejo si tú o la persona que representas son arrendatarios o no son dueños del inmueble.
Una vez seas escogido como administrador, es hora de oficializarlo ante la alcaldía correspondiente. Esto lo harás según la ubicación de la copropiedad. Debes llevar a la oficina pertinente el Acta de Asamblea de Copropietarios en donde se te nombra como administrador. Asimismo, la carta en donde aceptas el cargo y la fotocopia de tu cédula.
Lo que puedes hacer como administrador de propiedad horizontal
Entre tus funciones tienes la potestad de reunirte con los demás copropietarios para presentar las cuentas de ejercicios anteriores o actuales. Así como llevar los libros de actas de las asambleas.
Debes preparar para el Consejo de Administración las cuentas anuales de la propiedad. Allí vaciarás la información de los ingresos y egresos detallados del ejercicio. También debes cuidar y vigilar los bienes comunes, así como ejecutar los actos de administración de dichos bienes.
La cara visible ante el resto del mundo
Es importante que sepas que, como en una empresa, eres el representante legal del mismo ante los ojos del mundo. Así que representaras al conjunto o concederás poderes especiales para la representación del mismo a terceros, en caso que sea necesario.
De igual manera, notificarás a los demás copropietarios las sanciones impuestas en la Asamblea General. Como administrador no solo recaudarás el dinero de los copropietarios. También serás su representación ante el resto del mundo.
Es un compromiso enorme e implica una gran responsabilidad. Pero si eres cuidadoso, atento y organizado, podrás hacer una excelente labor por tu comunidad desde esa posición.